¡Es tiempo de higos! ¡Es tiempo de mermelada de higos!
Una de las buenas cosas que trae el mes de septiembre, además de la vuelta al cole, es que las higueras están que rebosan de esta fruta lechosa y sugerente que tanto nos gusta. En La Natural hemos hecho acopio de higos de leche, y hemos preparado una partida de mermelada artesanal, a nuestro estilo. Como siempre, la fruta la hemos comprado a agricultores de la isla, que miman sus huertos y no utilizan productos tóxicos.
Estuve investigando y resulta que existen muchísimas variedades de higo, aunque principalmente podemos dividirlas por el color en blancas, coloradas y negras. Las primeras tienen un color blanquecino amarillento, las coloradas tienen un color pardo azulado y las negras, varían del púrpura al negro puro.
Además, según el tratamiento que hagamos de ellos, los podemos dividir en dos categoría, según se destinen al consumo en fresco o desecados.
Nosotros emplemos los llamados higos de mesa, que son los que se destinan al consumo de fruta fresca. Su piel es tierna, con muy pocas semillas y de maduración larga. Su aroma es muy intenso y aún quedará impregnado en nuestra cocina, días después de haberlos cocinado y envasado. ¡Un verdadero placer!

Por si no lo saben, los higos no solo están buenísimos, sino que además son muy benefeciosos para nuestra salud:
– Aportan muchísima fibra, por lo que resultan muy eficaces para regular el tránsito intestinal y contrarrestar otros trastornos gastrointestinales.
– También cuentan con un alto porcentaje de agua en su composición -entre el 70 y 80%-, así que son muy adecuados para aquéllos que realizan trabajos físicos o que tienen problemas nutricionales.
– Su contenido en grasas no es excesivo (65 kcal por cada 100 g), como tampoco lo es su aporte en proteínas. Eso sí, las personas diabéticas o con obesidad deberán consumirlo con moderación a causa de su contenido en azúcar.
– Los higos tienen muchas propiedades antirreumáticas, que los hace ideales para personas con este tipo de achaques, y para aquellos que practican mucho deporte.
¿Les parece poco? Pues aún hay más beneficios:
– Se le atribuyen propiedades favorables para el sistema respiratorio por su poder expectorante. Podemos comerlos para combatir caterros, bronquitis, mucosidad excesiva, etc.
– Aportan antioxidantes naturales, que ayudan a prevenir el envejecimiento celular y a combatir los radicales libres, que son los causantes de múltiples enfermedades graves como el cáncer o diversas patologías degenerativas.